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alta resistencia desgarro
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alto índice de contracción
en la limpieza en seco
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alta temperatura de contracción
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alta resistencia a la abrasión
Una
resistencia al desgarro
puede, por contra, producir una rotura al coser. Los botones grandes pueden
desgarrar el cuero durante la limpieza en seco y es aconsejable que se
saquen antes. En algunos casos también es conveniente quitar los
botones pequeños del reverso. Durante la limpieza en seco pueden
desgarrarse las zonas muy delgadas.
La
contracción no puede
ser determinada antes de limpiar la prenda pero es muy conveniente tomar
la medida inicial de ancho y largo total para evitar pérdidas exageradas.
Una contracción del área del 5% generalmente puede ser tolerada
debido a que en la rehumidificación, vaporización y extensión,
antes del planchado, pueden restablecer este grado de contracción.
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Si la prenda se calienta por encima de
su temperatura de contracción ya sea en el bombeo o en el
planchado a vapor se producen daños irreversibles por la acción
del calor. En este caso se produce un endurecimiento general y, si es fuerte,
incluso ruede romperse el cuero.
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En la práctica del secado de prenda
de cuero, la temperatura de la corriente de aire en el bombeo de secado
debe ser inferior a 50 ºC.
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La vaporización tampoco debe exceder
de esta temperatura en el cuero, y deberá hacerse siempre antes
del planchado y no cuando la prenda esté bajo presión.
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Algunas prendas de cordero de color blanco
tienen una curtición sal-alumbre y presentan una resistencia al
calor sólo ligeramente superior a la de la piel en bruto. En este
caso la temperatura en el bombo de secado debe reducirse a 37 ºC y
no hace la vaporización. Un ensayo rápido es poner la lengua
sobre el cuero y si el gusto es un salado típico se confirma que
lleva este tipo de curtición.
La resistencia a la abrasión
es sólo importante si la penetración del colorante no es
uniforme (ensayar descosiendo en el borde). La limpieza por abrasión
consiste en esmerilar las fibras. La pelusa que se produce puede ser de
diferente color debido al color de la curtición original. En un
pequeño grado el bombeo también abrasiona la superficie y
los bordes pueden mostrar defectos de coloración diferenciales.
Zonas muy delgadas afelpadas pueden perder la pelusa y dejar sólo
la capa de flor. |